En su informe más reciente (2021), el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC) concluye que la actividad humana está cambiando el clima de una forma sin precedentes y, en ocasiones, irreversible. Definido como un "código rojo para la humanidad" por el Secretario General de la ONU, António Guterres.
Sin embargo, si bien la emergencia climática puede ser la misma en todo el mundo, los impactos no afectan de la misma manera, y aquellos que menos contribuyeron a la crisis climática son los que más sufren sus impactos debido a las actuales desigualdades socioeconómicas.
Dada esta diversidad en el impacto y las ambigüedades en la comprensión de la crisis climática, el consorcio #ClimateOfChange seleccionó cuatro países para examinar el complejo nexo entre la crisis climática y la movilidad humana.
La crisis climática en Guatemala, Senegal, Kenia y Camboya:
El equipo de investigación multidisciplinar de la Universidad de Bolonia adoptó, entre otras herramientas cuantitativas y cualitativas, métodos visuales para intentar desafiar las representaciones estigmatizadas de la emergencia climática y los llamados migrantes climáticos como víctimas o amenazas. Se adoptó una metodología innovadora de "diarios climáticos" (Giacomelli & Walker, 2021) pidiendo a los participantes de cada país de estudio que compartieran fotografías y percepciones de la crisis climática durante un período de cuatro semanas a través de un grupo de WhatsApp. De esta manera, se visualiza el impacto en las vidas y los medios de subsistencia de quienes se encuentran en la primera línea de la crisis climática.
Participaron 30 personas en cada grupo y cada semana recibían una pregunta a la que responder visualmente con entre una y cinco fotografías y una breve explicación. Los participantes eligieron qué preguntas responder y cuáles no. La pregunta sobre la movilidad fue la más difícil de responder. Muchos optaron por no hacerlo. La idea era proporcionar historias personales, coconstruidas por los propios participantes, para evidenciar la diversidad de experiencias y comprensiones de la crisis climática y su compleja conexión con la migración.
Lo que surgió poderosamente de las imágenes compartidas es cómo la crisis climática no es una amenaza futura para los participantes, sino una fuerza devastadora de su vida cotidiana aquí y ahora. Sin embargo, una fuerza que no es puramente "natural", sino que está entrelazada con factores políticos, económicos y culturales estructurales que empeoran los impactos de la crisis climática en la vida diaria. Aquí hay una selección de las respuestas de los participantes, a quienes les agradecemos por emplear en esto parte de su valioso tiempo.