Sam Njoroge, defensor del humedal de Ondiri: “Gracias a nuestra presión, el Gobierno viene a escucharnos”

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Escrito por Moha Gerehou.

Friends of Ondiri Wetland (Grupo de Amigos del Humedal de Ondiri) es una organización que lucha por la conservación de un espacio natural que suministra agua a la capital keniana, Nairobi, pero que se ve amenazado por la contaminación y los vertidos ilegales.

La sensación al pisar el humedal de Ondiri, situado en la localidad de Kikuyu (a pocos kilómetros de Nairobi), es la de caminar sobre una cama elástica. Apoyas el pie y se hunde un poco, pero te sostiene con firmeza. Aunque hay una diferencia notable: saltar no te manda con impulso hacia el cielo, sino que, casi con total probabilidad, te llevará a las profundidades del humedal. La leyenda de la zona dice que es un camino directo a un lago que en la superficie se recorre en algo más de hora y media en vehículo.

Este peculiar ecosistema es un humedal que, a raíz de varios procesos de deforestación y de la acción humana, ha acabado con la superficie recubierta de una capa relativamente sólida de juncos y barro con la suficiente fortaleza como para sostener el peso de un grupo de personas que lo pueden cruzar de un lado a otro. El humedal de Ondiri, del que una parte de la población se ha abastecido con agua, también ha sufrido amenazas de vertidos contaminantes y otros elementos externos.

Ante ello, un grupo de voluntarios de la región decidió organizarse para su protección y conservación bajo el nombre de ‘Friends of Ondiri Wetland’. Uno de sus miembros es Sam Njoroge, nacido en Kikuyu y cuya pasión siempre fue viajar. De ahí que pusiera en marcha una empresa de viajes y excursiones sostenibles por Kenia. Con él, en el marco del proyecto Climate of Change, conversamos sobre las amenazas del humedal de Ondiri y de las formas de resistencia y protección que han desarrollado.

¿Qué hace de las Ondiri Wetlands un lugar importante tanto a nivel personal como para la comunidad? 

Los humedales son muy importantes para mí como individuo y para la comunidad porque son la fuente de agua para nuestra comunidad. Yo bebo el agua de esta fuente y mi comunidad, de unas 200.000 personas, consume esta agua directa e indirectamente. Si no aprovechamos o no conservamos bien este lugar, significará que negaremos a muchos miembros de la comunidad su derecho al agua y al medioambiente.

¿Y cuáles son las amenazas relacionadas con el cambio climático a las que se enfrenta este lugar?

La principal amenaza es, básicamente, la contaminación debida a las actividades humanas como, por ejemplo, esta carretera que tenemos al lado.

¿Y por qué construyeron esta carretera tan cerca de los humedales?

Hubo una evaluación del impacto ambiental por parte del organismo que regula las carreteras nacionales de Kenia. Y una de las razones de por qué se ve más cerca aquí es porque de acuerdo a pasar la carretera, el centro de los humedales. Uno, los conservacionistas del medio ambiente que están en contra de eso. Número dos, el humedal es muy profundo. El tribunal no sostuvo el pilar para la carretera y habría sido muy caro. Es por eso que usted ve que es todavía muy cerca del humedal, sin embargo, con un poco de mitigación. Sí, a través del impacto, la evaluación del impacto ambiental.

Además de la contaminación, ¿a qué otras amenazas se enfrentan?

Otras amenazas son el uso de fertilizantes químicos, porque el medio de vida de la gente de esta zona es principalmente la agricultura. También ocurre que, en esta nueva era de urbanización, hay muchos desarrollo de infraestructuras y apartamentos que están apareciendo demasiado rápidamente. Además, falta una gestión adecuada de los residuos.

Lo acabas de mencionar, formas parte del Grupo de Amigos de los Humedales de Ondiri que se organiza para preservar este entorno. ¿Qué actividades lleváis a cabo para cuidar este lugar?

El Grupo de Amigos de los Humedales de Ondiri es un organismo que reúne a las partes interesadas en la conservación del entorno: agricultores, la comunidad, las instituciones de aprendizaje y los organismos gubernamentales. Una de las principales actividades que realizamos es reunir a esta comunidad para expandirnos y llegar a más gente.

Hacemos formación para la concienciación de la comunidad. Buscamos el apoyo de socios que puedan acogernos y reunimos a la comunidad para enseñarles temas de conservación como, por ejemplo, por qué es necesario tener una agricultura orgánica frente al uso de fertilizantes químicos. Hay mucho trabajo de sensibilización. 

Otra cosa que hacemos es movilizar recursos, sobre todo, personal humano. Pedimos a la gente que dedique algo de tiempo y, si puede, que gaste algunos de sus recursos para nuestro trabajo. También tenemos un centro de información con un aseo ecológico que nos genera ingresos. Cuando vienes y utilizas los servicios de este aseo, la cantidad que pagas sirve para mantener a quien se encarga de estos recursos y supervisa lo que ocurre alrededor de los humedales. Pero aún tenemos una gran oportunidad para aprovechar nuestros recursos.

Has hablado de la educación y no puedo evitar pensar en la juventud de la zona. ¿Están implicados en el proceso de cuidar este lugar?

Sí, los jóvenes aceptan las cosas nuevas y quieren asociarse. Empezamos nuestras actividades de forma consistente en 2016 y, desde entonces, vemos mucho apoyo de su parte. En el Día Mundial de los Humedales vimos a muchos jóvenes venir a apoyar nuestros esfuerzos de conservación. Aceptan el trabajo que hacemos y quieren participar más.

¿Y qué papel tiene el Gobierno de Kenia? ¿Es un aliado o una amenaza?

Podemos decir que el Gobierno de Kenia es más un aliado. Son quienes nos han permitido formar parte del Grupo de Conservación. Luego, organismos como la Water Resources Authority (Autoridad de Recursos Hídricos) y la National Environmental Management Authority (Autoridad Nacional de Gestión del Medio Ambiente), que es una entidad del Gobierno, y también los gobernantes del condado de Kiambu han venido a apoyar nuestras acciones, ya que este recurso lo utilizan para suministrar agua a las comunidades. Son beneficiarios y están obligados a conservar el agua.

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Biografía del autor

Moha Gerehou nació en Huesca en 1992, con orígenes en Gambia, de donde sus padres emigraron hace más de treinta años. En Madrid se formó como periodista y entró en eldiario.es, donde gestiona las redes sociales y crea contenido relacionado con el racismo y las migraciones. Militó durante varios años en SOS Racismo Madrid, donde llegó a ser presidente (2016-2018). Participó en el libro colectivo Lost in Media: Migrant Perspectives and the Public Sphere. Además, es orador en los campus de las universidades de Siracusa y de Stanford en Madrid y es autor del monólogo Cómo sería mi vida si fuera un negro de película, donde pone en evidencia los estereotipos raciales sobre la población negra que consumimos en películas, series, anuncios y fotografías, desmontándolos desde el humor, la ironía y la crítica.