Jóvenes de todo el mundo están alzando la voz y se están movilizando para proteger el futuro del planeta, exigiendo a los gobiernos que frenen el cambio climático. Deberíamos seguir su ejemplo.
Sin embargo, el cambio climático ya es una realidad y las comunidades más vulnerables se llevan la peor parte de sus efectos. Sus vidas han sido puestas patas arriba y, en ocasiones, se ven obligadas a marcharse para sobrevivir, convirtiéndose en migrantes climáticos.
Sus voces van a ser un elemento fundamental de nuestra campaña. Nuestro objetivo es destacar la conexión entre migración, cambio climático y la necesidad de transformar nuestra economía y cambiar nuestras vidas cotidianas. Nuestra visión se centra en defender necesidades y proteger los derechos humanos de todas las personas, sin explotar a otros ni destruir el medio ambiente.
Para crear una economía justa tanto desde el punto de vista social como medioambiental, concienciaremos, defenderemos políticas eficaces que sean útiles para la gente y actuaremos como protagonistas de nuestro futuro.
Nuestra campaña apela a la juventud a que participe en un cambio que ya está en marcha, que se sume a las numerosas iniciativas puestas en marcha en todo el mundo y que anime a la gente a tomar medidas.
Las autoridades nacionales, europeas y mundiales deben y pueden hacer más para aprobar políticas migratorias y climáticas ambiciosas y sostenibles.
Juntos podemos crear un clima de cambio, un mundo justo y sostenible.